El acceso limitado a los servicios básicos de salud sigue siendo un reto de gran escala para las comunidades Indígenas de todos los continentes, y la emergencia sanitaria por COVID-19 ha evidenciado más esta precaria situación. Sin embargo, a lo largo de la historia los Pueblos Indígenas hemos tomado el control para garantizar la salud y la vida en nuestros territorios.